1. — Felipe II (1527-1598)
IMPERIO
Felipe heredó varios territorios que son los siguientes. Heredó España, es decir Castilla, Aragón, Navarra y Granada. De América heredó desde California hasta Florida, y desde Florida hasta el Estrecho de Magallanes. De la zona centroeuropea heredó la zona de Flandes (Países Bajos), el Franco Condado, el Milanesado, Nápoles, Sicila y Cerdeña. Heredó algunas ciudades de Marruecos como Melilla, Tánger, Alcazarquivir o Vélez de la Gomera. Además heredó Orán y las Islas Filipinas.
Aparte de estas herencias adquirió Portugal gracias a los enlaces matrimoniales entre las dos familias en 1581. Esta anexión de Portugal también incluía Brasil, y algunas costas africanas y asiáticas.
OBJETIVOS PRINCIPALES
Felipe tenía dos grandes y principales objetivos:
– Administrar bien el Imperio y controlarlo.
– Defender la Iglesia del Islam. Esto lo hizo y se convirtió en el “jefe de la Contrarreforma”.
2. — Problemas internos
CRISIS EN CASTILLA
Castilla es el principal surtidor de hombres para ir a las guerras en Europa con Francia, Inglaterra y los Países Bajos, los Tercios son castellanos. Además muchas familias y sobre todo hombres castellanos van a América a colonizarla. Así, Castilla se despobló en gran medida.
Las guerras, sobre todo durante el reinado de Felipe, produjeron tres bancarrotas en 1557, 1575 y 1597. Aún así, estas guerras no eran la única razón, también influyó la inflación de la moneda, ya que Castilla es el motor del comercio de la lana, y por tanto circula mucho dinero por el reino. Para esto se acuña moneda y se suben los precios, pero ese dinero es mandado a las guerras, así que en Castilla quedan precios altos y poco dinero: se produce una crisis económica.
GUERRA DE LAS ALPUJARRAS (1568-1571)
Aún casi 80 años después de la Conquista de Granada y de la expulsión de los musulmanes, quedan moriscos. Hay una razón de fondo de porqué no fueron expulsados totalmente, y es que estos moriscos trabajaban y producían mucho y era rentable que se quedasen en la península.
Esto se convirtió en un problema al igual que pasó con los Reyes Católicos, el Islam estaba creciendo y atacando Europa y el tener musulmanes en la Península era peligroso ya que eran una entrada para el Islam. Ahora pasa lo mismo, el Islam asolaba y controlaba el Mediterráneo y además a los moriscos granadinos les surgió el deseo de resucitar el Reino Nazarí de Granada.
En el año 1568 estalló la revuelta que tenía una razón de fondo y muchas por encima. La principal, la de los líderes era recuperar el Reino Nazarí de Granada, pero para motivar y conseguir gente para la causa usaban otras como que cuando había crisis en el reino, lo pagaban ellos con impuestos, que tenían que respaldar las crisis y que Felipe estaba abusando de ellos.
Finalmente la revuelta fue sofocada y los moriscos fueron obligados a convertirse o a salir del país. Los que no hicieron ninguna de las dos cosas fueron matados y ajusticiados.
ANTONIO PÉREZ Y LA REVUELTA DE ARAGÓN
Antonio Pérez era el secretario de Felipe, quien le ayudaba a despachar y atender al pueblo y a los consejos. Por lo tanto este era el intermediario entre los consejos y el rey. En teoría era una persona de confianza del rey, pero el secretario podía cambiar el mensaje de los consejos para beneficiarse. Así, Antonio engañó a Felipe diciendo que Juan de Austria (hermanastro de Felipe) estaba revelando secretos de estado cuando en realidad era él mismo. Le descubrieron y él huyó a Aragón, porque conocía muy bien las leyes de cada reino y sabía que los fueros de Aragón dicen que si no has cometido delito en Aragón no puedes ser ajusticiado. Felipe II le pidió al juez de Aragón que le entregase a Antonio, pero el juez se negó ya que si lo hacía, esa ley sería nula.
Al final Felipe lo tuvo que hacer por la fuerza y mandó un ejército a Aragón. El juez murió y con él la institución de juez supremo.
3. — Política exterior
POLÍTICA CON FRANCIA
Francia comenzó atacando España, y Enrique II le declaró la guerra a Felipe. En los asedios de San Quintín y Gravelinas gana Felipe. En el año 1550 firman la paz en el Tratado de Cateau-Cambreis.
Después de este tratado, los hugonotes calvinistas querían deponer al monarca católico Enrique II y defendían a Enrique de Navarra. A raíz de esta disputa surgen 8 guerras, las llamadas “Guerras de los Enriques”, ya que participan tres Enriques. Estas guerras de religión (1562-1594) acabaron sin ganador.
En 1598, en Vervins, se llegó a un acuerdo intermedio. Esta solución era que el monarca sería Enrique de Navarra siempre y cuando se hiciese católico. Se hico católico y dijo la famosa frase de «París bien vale una misa». Asedio de Gravelinas
IMPERIO OTOMANO
Los turcos habían ocupado Malta (1565) y Chipre y Túnez (1570). Malta en especial era clave para controlar el Mediterráneo, era una isla casi inexpugnable, desde donde se podían mandar navíos de guerra contra cualquier buque enemigo.
Felipe II, el Papa Pio V y la Serenísima República de Venecia formaron la Liga Santa para derrotar al Islam de una vez por todas. Esta campaña iba a ser marítima, y cada uno de los componentes de la Liga, aportaron una cosa distinta. La Serenísima República de Venecia aportó muchas naves y navegantes, Felipe II aportó naves y muchos soldados y el Papa dio dinero y la bendición de esa cruzada.
Estas naves se le encomendaron a Juan de Austria, quien ganó en el 1571 en la Batalla de Lepanto. Así frenaron el avance musulmán por el Mediterráneo. Esta batalla fue la última batalla naval de carácter medieval.
LOS PAÍSES BAJOS
En los Países Bajos pasó lo mismo que pasó en el Imperio con Carlos V, en el norte estaban los burgueses y comerciantes calvinistas y en el sur la nobleza católica. En el año 1566, Guillermo de Orange, un protestante del norte de los Países Bajos se sublevó contra la Corona Española, y se produjo una guerra.
Al principio (1567-1573), se enviaron los Tercios, liderados por el Duque de Alba, que ocuparon los Países Bajos. Consiguieron apaciguar la revuelta y controlar a los calvinistas, pero Alba lo consiguió con una gran represión, metiendo miedo. Esto tuvo una grave consecuencia, el pueblo vio que los católicos paraban a los protestantes por la fuerza, matando y eso a muchos no les gustó así que se cambiaron de bando. El Duque de Alba fue depuesto y reemplazado por Luis de Requesens y Zúñiga, que fue demasiado blando. Después de Requesens, llegó Juan de Austria, que fue el que mejor controló la situación desde un punto medio. A su muerte, le sucedió Alejandro Farnesio, que también resultó ser blando.
En el 1580 Inglaterra tomo partida en esta guerra a favor de los protestantes. En el 1581, los católicos vieron esta situación e hicieron la Unión de Arrás. Como respuesta, los protestantes hicieron lo mismo, fundaron la Unión de Utrecht. Estas dos ligas marcaron una ruptura oficial dentro de los Países Bajos, la de Utrecht se independizó y declararon a Francisco de Valois, hermano de Enrique III, rey de Holanda. Inglaterra les reconoce como independientes, pero Felipe II lógicamente no. Este conflicto se prolongó muchísimo tiempo, tanto que no acabó hasta el 1848 en la Paz de Westfalia.
En orden: Guillermo III de Orange, el Duque de Alba, Luis de Requesens y Zúñiga, don Juan de Austria, Alejandro Farnesio y Francisco Valois.
INGLATERRA
Inglaterra era un reino protestante anglicano, pero cuando llegó Felipe al poder existió la posibilidad de acabar con la dinastía protestante y poner a Felipe como rey consorte. Esto fue posible ya que Felipe se casó con María Tudor (1554), que tenía posibilidades al trono y lo consiguieron. Felipe no tuvo hijos con María, y se alejó de ella, la dejó sola (aún así seguía prefiriendo que reinase ella que alguien protestante). Los anglicanos se levantaron contra María, la apresaron y la oprimieron. Finalmente, a su muerte coronaron a Isabel I. Isabel era la candidata anglicana, y era hermanastra de María, tenían la misma madre, pero no padre.
Isabel I persiguió mucho a los católicos, y se metió en el conflicto de los Países Bajos a favor de los protestantes.
Favoreció la piratería contra España y contra el comercio con América. Para esto otorgó Patentes de Corso, que firmaban la reina y un navegante (corsario). En estas patentes, la reina se comprometía a no perseguir al particular por atacar a los buques españoles, para ella el corsario era un héroe. Además les protegerá y cualquier barco de la corona inglesa (no corsario) que viese un navío corsario por el Atlántico debería seguirle y protegerle. El corsario por su parte se compromete a dar parte del botín a la corona.
Estos corsarios se convirtieron en un muy grave problema para Felipe, así que Felipe reúne una gran flota de unos 200 navíos, formada en gran parte por buques mediterráneos, lenta y que tenía como objetivo conquistar Inglaterra. El plan era llegar a Flandes, embarcar a los Tercios y desembarcar en las costas inglesas. La flota salió de Lisboa el 30 de Mayo del 1588 y pasando por Galicia, estuvo navegando el verano hasta llegar al Canal de la Mancha. Allí llegó la primera semana de Agosto. Los ingleses dirigidos por Francis Drake, se dedicaron a hostigar la flota española, pero no causaron grandes daños. Cuando llegaron a Flandes, los ingleses se dirigieron a sus costas para conseguir municiones.
Cargaron, y mandaron unas barcazas llenas de pólvora a los puertos flamencos donde estaban los españoles. Estas explotaron cerca de ellos y provocaron fuego. Esta explosión no causó daños físicos en la flota, pero si produjo un gran caos, que hizo que los buques españoles saliesen rápidamente del puerto. Los ingleses estaban acechando en sus puertos y en línea fueron disparando a los navíos que salían del caos. No hundieron más de cinco naves, pero hundieron la nave capitana, lo que provocó más desorden y pánico. La Armada intentó huir rodeando Inglaterra, por el norte, pero muchas naves naufragaron en las costas del norte y otras en el intento de bajar a tierra y conseguir comida y munición fueron atrapadas.
Este desastre de La Armada Invencible (nombre posterior) en el año 1588 supuso el fin de la hegemonía naval castellana y de la intención de conquistar Inglaterra.